En la seguidilla de nuestros viajes por el norte, había un lugar que yo solo conocía de nombre y que nunca pensé visitar, Chungará , porque lo encontraba lejos, alto, y demasiado desgastador, además yo quería aprovechar las maravillosas playas que nos ofrecía Arica, eso lo iba pensando en el trayecto hacia esa hermosa ciudad y también conversándolo con mis compañeros de viaje bueno eso era antes de llegar, porque cuando ya estábamos, allí nos dimos cuenta que el invierno boliviano, estaba siendo demasiado duro con algunas localidades de la zona , mucha agua con barro y esta iba a parar directamente a …las playas de Arica ,solo servirían eventualmente para tomar baños de……..sol.Decididos a correr la aventura, dijimos no vamos a comer ajo ni nada por el estilo, lo mas natural posible tomamos desayuno en el camino y ya está. Salimos con un día espectacular,
(pensaba ,deberíamos estar en la playa), a poco andar encontramos la picá , un vagón de tren adaptado como cafetería atendido por el dueño, un alemán, gringo, una mezcla de ambos, este señor vendía te, café, pan amasado y “hoja de coca” que se tomaba como te, yo por la experiencia del Tatio me aperé del tecito de coca, cosa que ninguno de mis compañeros de viaje hizo, de las mismas hojas remojadas de mi te hice una bola (la cual al principio era amarga) y me mantuve todo el camino mascándola como un chicle, eso era para no apunarme, me dijeron……A medida que avanzábamos el paisaje cambiaba , y la fauna también, en el camino se veían letreros, disminuya la velocidad este camino es atravesado por vicuñas, llamas etc. O sea debe haber habido tal cantidad de atropellos, que tuvieron que poner esos carteles, esa es la carretera que une Arica , La Paz, y los camioneros ¡!!como corren¡¡¡¡ también se dejaban ver algunos animalitos silvestres , como las chinchillas, los coipos, algunos visones, y los zorros plateados,!!!todo un espectáculo¡¡¡¡¡¡¡, muchos bofedales(unas especies de musgos) y la gran fauna de flamencos y patos, todo distinto, muchos riachuelos , formados por los escurrimientos del
invierno altiplánico.Todo hasta ahí normal, y yo con mi bola de coca, el tráfico en el camino es muy abundante, no hay forma de perderse la huella está en excelentes condiciones todo asfaltado, nos parábamos mucho cuando veíamos algo interesante y como todo!!!era interesante¡¡¡¡¡, cuando llegamos , las típicas fotos, y ya se empezaron a evidenciar lo mal que empezaban a ponerse mis compañeros a esos 4517 mts..de altura y¿ yo? estaba como tuna, mi marido, hermana y mi hijo valían callampa, había que evacuar rápido antes que la puna atacara a mi cuñado, el otro chofer, creo que estuvimos no más de 20 minutos en el lago mismo .Salimos entre un invierno con una lluvia, unos granizos, luego, un viento, y un sol que nos achicharrábamos, mi cuñado no estaba del todo bien y tuvimos que pasar a Parinacota para un poco recuperarse ,estaban con vómitos y diarrea, Había en el centro del pueblo la típica Iglesia ,y unos mocosos jugando a la pelota ,que eran la envidia de mis compañeros, cabros wueo… ¡!!! que capacidad pulmonar tienen¡¡¡¡bueno y ellos se pegaron una descansada de padre y señor mío luego continuamos nuestro camino, mientras mas abajo estábamos mejor se sentían los 
“enfermos”.En el camino hacia abajo ,los tipicos letreros, cuidado zona de avistamientos de ovnis, Chiquillos , si tienen la ocasión de viajar a Arica, hagan el esfuerzo de realizar una visita turística, existen agencias de viajes que realizan este tour y jejejeje yo dije que mi puna del Tatio la iban a sentir en otra parte, para que supieran lo que uno siente. Hay dos fotos extraidas de internet, la otra es de la época, donde
aparece mi hijo, mi marido, y yo
